PSICOTERAPIA DE GRUPO
Con los adolescentes es frecuente trabajar dificultades en las habilidades relacionales, como timidez, inadecuación o temores anticipatorios, que impiden la inclusión social en diversos contextos y las relaciones socio afectivas satisfactorias. La construcción interpersonal e intersubjetiva se ve potenciada, y el grupo facilita la exploración de procesos como el liderazgo, la colaboración y las luchas de poder entre los integrantes, la aceptación, el sentido de pertenencia y la individualización, y la aportación al grupo.
En los adolescentes es frecuente crear grupos “monográficos”, por ejemplo para el fomento de la Autoestima o el entrenamiento en Habilidades Sociales, con un número fijo de sesiones.
Para formar los grupos los profesionales tendrán al menos una reunión con cada posible miembro y los padres de este (a). Una vez seleccionados, los grupos pueden ser de cinco a doce personas que se reúnen con una periodicidad definida para abordar los asuntos de interés de cada miembro, es decir, los objetivos que se trabajan son individuales e individualizados. Las sesiones suelen tener una periodicidad quincenal o mensual y duran 90 minutos.